El género urbano es, hoy por hoy, el más popular y destacado dentro de la música a nivel global. La supremacía del estilo hip hop, mezclado con los nuevos sonidos trap, es una tendencia que no ha hecho más que crecer en los últimos años. Todavía perviven algunos artistas “de los de antes”, con canciones pop al uso, baladas románticas o sonidos más electrónicos. Sin embargo, lo urbano ha ido extendiéndose por todas las listas de éxitos, hasta conseguir inundarlas con producciones que triunfan especialmente entre los jóvenes. Se escuchan en las radios, se bailan en los boliches y las fiestas, y se comparten por las redes sociales en vídeos cortos y divertidos. Y dentro de ese imperio musical, el matiz latino está más presente que nunca, llegando a copar los primeros puestos por artistas cantando en español. La mayoría de ellos pertenecen al estilo reggeaton o trap latino, pero todos tienen algo en común: sus raíces.
Puerto Rico se ha convertido en la gran puerta de entrada de esos sonidos a la maquinaría de la industria en Estados Unidos. Esta isla caribeña, que técnicamente pertenece al país norteamericano, ha conservado sus raíces, empezando por el idioma. En estos últimos años ha logrado exportar una gran cantidad de artistas de gran éxito, como Ricky Martin, Calle 13, Bad Bunny o Jhay Cortez, que han logrado superar las barreras del exigente mercado estadounidense. Algunos de ellos han incursionado en el inglés, un idioma que suelen dominar en la isla, pero la mayoría se han permitido el lujo de triunfar en todo el mundo cantando en español. El idioma ya no es un escollo, sobre todo en estos géneros que tan en boga están en los últimos tiempos. El empuje latino viene de lejos, desde luego, pero ha sido ahora cuando el mundo entero ha entendido que se puede bailar al ritmo de esos sones caribeños cantados en español. La historia de Cortez, a diferencia de la de otros compañeros, sí que tiene una gran vinculación con Estados Unidos, al haber crecido en aquel país. Tal vez por eso, el puertorriqueño ha logrado mimetizarse con la cultura norteamericana sin perder sus raíces.
Inicios como cantante
Nacido en San Juan de Puerto Rico, Jesús Manuel Nieves Cortez se mudó con toda su familia a Nueva Jersey cuando todavía era un niño. Así fue como adquirió un dominio total del idioma inglés, teniendo una niñez bilingüe. Apoyado por su familia, Jhay comenzó a componer canciones con solo 15 años, llegando a colaborar con artistas ya medianamente reconocidos.
De hecho, incluso produjo algunas canciones que tuvieron relativo éxito entre el público del reggeaton de la época. En 2011, con apenas 18 años, compone varias canciones para el popular artista Tito el Bambino, en un disco que logró llevarse un Grammy Latino al Mejor Álbum Tropical. Cortez ya había llamado la atención del público, y era el momento de dar el gran salto en su carrera como intérprete.
Su llegada al éxito
Sus primeros proyectos llegaron en 2015, como parte de una boy band latina llamada Stereo 4. Era un proyecto de un famoso productor norteamericano, que buscaba emular el éxito de este tipo de bandas en un estilo en el que todavía no habían triunfado, el reggeaton. Cortez formó parte del conjunto durante un año y medio, componiendo varios temas y recibiendo los primeros reconocimientos como cantante. Posteriormente se entendería que este proyecto era una simple prueba para lanzarle a él en solitario, ya que en 2017, apenas un par de años más tarde, aparecerían sus primeros singles, casi todos con colaboraciones importantes. De hecho, Cortez colaboró en la elaboración del tema Criminal, de Natti Natasha, uno de los que más fuerte pegaron en 2018. Su fama iba creciendo, y el título de su primer álbum, lanzado en 2019, así lo demostró. Famouz vio la luz cuando Cortez ya era bastante reconocido entre los amantes del reggeaton, más como compositor que como intérprete, eso sí.
Canciones como No Me Conoce le llevarían a entrar en las listas de éxito de toda Latinoamérica, y en 2021, con el lanzamiento de su segundo disco, Timelezz, su éxito se afianzó. De hecho, llegaron numerosos reconocimientos, entre ellos el varios premios Billboard Music por la canción Dakiti, una de las más radiadas del año. A pesar de la enorme competencia en el estilo, Cortez logró diferenciarse del resto, especialmente gracias a sus composiciones. Al tener experiencia en ese registro, el artista puertorriqueño es capaz de hacer letras que enganchan, y temas muy bailables. Además, sus controversias fuera del estudio y los escenarios también han ayudado, todo hay que decirlo, a que gane mucha más fama.
Su relación con la pornstar Mia Khalifa
Y es que Cortez ha protagonizado varias controversias en los últimos años, algunas relacionadas con la música, y otras con su propia vida privada. De las primeras destacan sus befes con su compatriota Rauw Alejandro, otro artista de reconocido prestigio que en 2021 lanzó seguramente el tema más popular del año, poer encima del Dakiti de Cortez. La enemistad entre los dos reggeatoneros viene de lujos, y sus cruces de declaraciones han llegado también a sus canciones. Es algo habitual en los artistas urbanos actuales, como también ha ocurrido con Residente y J. Balvin. Sin embargo, parece que la cosa no ha llegado a mayores, y que ambos artistas han decidido dejarlo estar, al menos por ahora. En 2021, Cortez apareció también en las revistas del corazón por su relación con la estrella del porno Mía Khalifa, una de las actrices más reconocidas de la industria.
La celebridad, de origen musulmán, había participado en la grabación del sensual clip En Mi Cuarto, y parece que la tensión entre ellos les duró mucho más que el propio rodaje. Intentaron evitar que la relación saliera a la luz, pero unas filtraciones desvelaron que estaban juntos. Aparecieron así en varias entregas de premios a lo largo de todo 2021 y parte de 2022, convirtiéndose en una de las parejas más deseadas del planeta. Sin embargo, parece que durante el verano de 2022 la relación se rompió, ya que Khalifa borró todas sus fotos conjuntas en sus redes sociales. Los rumores apuntan a que Cortez podría haberle sido infiel, aunque ninguno de los dos ha querido hablar sobre ese tema. El nombre de ambos, sin embargo, se ha mantenido en las noticias más cadentes durante semanas.
Un artista con mucha proyección
Cortez es, a punto de cumplir los 30 años, uno de los artistas latinos con mayor proyección. A pesar de su experiencia como productor y compositor, podemos decir que su carrera como intérprete apenas tiene tres años. Aun así, ha logrado ya premios muy importantes, y ha ocupado un lugar en lo más alto de la industria musical, que busca siempre nuevos ídolos.
Su facilidad para componer temas pegadizos es una de sus mayores armas para conquistar el género del reggeaton urbano, que parece resistirse a morir. Con la popularidad y los premios de su parte, Cortez también se ha convertido en una de las colaboraciones más deseadas por aquellos artistas que quieren acercarse a este género y explotarlo a nivel comercial.